Ya sea frescos, en escabeche o como ingrediente de tus tortillas, los nopales son uno de los pilares de la gastronomía mexicana. Y no solo eso, también son considerados fundamentales para el futuro de la alimentación a nivel mundial, según un estudio de la FAO. Y como sabemos que no solo de mariscos vive el hombre en Cuaresma, te dejamos el paso a paso para preparar tostadas de nopal que, además de ser deliciosa, forma parte de las recetas saludables y fáciles del programa Vive Saludable, Vive Feliz.
Receta de tostadas de nopal estilo Chihuahua
Ingredientes:
2 nopales
35 g de frijoles
1 taza de lechuga
½ jitomate
2 rodajas de cebolla
2 hojas de cilantro
2 tostadas de maíz horneadas
80 g de queso fresco rallado
1 cucharadita de aceite
1 cucharada de guacamole
Preparación:
Cocer los frijoles y los nopales por separado en una olla con suficiente agua, cebolla y sal.
Lavar y desinfectar la lechuga, el cilantro y el jitomate, picar finamente.
Calentar el aceite en un sartén, agregar la cebolla, el cilantro y el tomate, sofreír.
Agregar los frijoles y los nopales, mezclar.
Servir sobre una tostada, agregar una base de frijoles, guacamole, la lechuga y el queso.
Las habas, conocidas científicamente como Vicia faba, son una de las legumbres más antiguas y versátiles en la gastronomía mundial y son muy consumidas en México. Con su rica historia y versatilidad culinaria, este ingrediente sigue siendo valioso en diversas cocinas alrededor del mundo, entre ellas, la mexicana. A continuación, te dejamos una receta de habas secas que es nutritiva y fácil.
Receta de habas secas con verduras
Ingredientes:
250 gramos de habas secas
1 cebolla mediana, picada
2 dientes de ajo, picados
1 pimiento rojo, cortado en cubos
1 jitomate grande, pelado y picado
2 cucharadas de aceite de oliva
1 cucharadita de pimentón dulce
Sal y pimienta al gusto
Agua (suficiente para cocer las habas)
Hojas de laurel y hierbas frescas
Foto: las habas son tan versátiles que existen cientos de recetas con ellas / Shutterstock
Preparación:
Remojar las habas secas en agua durante al menos 8 horas o toda la noche.
Escurrir y enjuagar las habas.
En una olla grande, calentar el aceite de oliva y sofreír la cebolla y el ajo hasta que estén transparentes.
Añadir el pimiento rojo y el jitomate picado, y cocinar por unos minutos más.
Incorporar las habas escurridas y cubrirlas con agua.
Agregar el pimentón dulce, sal, pimienta y las hojas de laurel.
Hervir la mezcla a fuego alto; reducir la flama y cocinar a fuego lento hasta que las habas estén tiernas (aproximadamente 1 hora).
Ajustar sazón y decorar con hierbas frescas antes de servir.
Beneficios de las habas
Su cultivo se remonta al periodo Neolítico, alrededor del 6,000 a.C., lo que las convierte en uno de los alimentos más antiguos de la humanidad. Te contamos algunos datos de este mágico ingrediente.
No solo son altamente beneficiosas para la agricultura, pues su cultivo ayuda a fijar nitrógeno en el suelo, mejorando su fertilidad y beneficiando el desarrollo de otras hortalizas, también tienen un gran impacto en la salud de quienes las consumimos. Pero, ojo, que sí importa si las comemos frescas o secas.
Las primeras tienen menos calorías y aportan más vitaminas y minerales (como potasio, calcio, magnesio, fósforo, hierro), y son buena fuente de fibra y de vitaminas del grupo B (folatos y niacina), ideales para mantener la estructura ósea en buen estado; mientras que las secas contienen más calorías y una mayor cantidad de magnesio y otros minerales. Son tan versátiles que existen muchas recetas con habas deliciosas y nutritivas.
Foto: frescas o secas, las habas son un ingrediente clave en la nutrición / Shutterstock
¿Manchas imposibles? ¿Olores extraños? ¿Sarro en el baño? La solución podría estar en tu alacena: el vinagre. Este ingrediente no solo lo puedes usar para tus ensaladas, pues ha demostrado ser una súper opción para otras cosas, como limpiar superficies, quitar el sarro o las manchas de jabón del baño, desinfectar frutas y verduras, y hasta para mantener pulcra la dentadura postiza de tu abuelita. Si te preguntas por qué es bueno para tantas cosas, sigue leyendo que aquí te contamos.
¿Por qué funciona tan bien?
Foto: la acidez del vinagre lo hace un ingrediente imprescindible para la limpieza y desinfección / Shutterstock
El secreto está en su acidez (con un pH hasta de 2.2), que lo hace lo suficientemente suave para no dañar nuestras preciadas prendas o superficies, pero lo necesariamente fuerte para eliminar manchas, el sarro difícil de quitar o cortar esa grasa que insiste en no irse.
El vinagre se obtiene por doble fermentación: primero, los azúcares provenientes de ciertos carbohidratos se convierten en alcohol y dióxido de carbono; luego, con la ayuda de bacterias como la Acetobacter y el oxígeno, en ácido acético… ahora entiendes por qué cuando olvidas tu vino y lo dejas destapado se vuelve agrio.
Otras de sus ventajas se debe a sus propiedades antimicrobianas... sí, por eso se volvió viral el redes sociales para desinfectar ciertas frutas (como las fresas) y verduras. Es cierto que hay algunas bacterias que son capaces de sobrevivir en ambientes ácidos, pero la mayoría no. ¿No nos crees? Simplemente piensa en los encurtidos y en su capacidad de durar días y meses; este método ancestral ha ayudado a la humanidad a conservar alimentos mediante la creación de un ambiente inhóspito con sal y vinagre.
Desinfectar ciertos alimentos se basa en lo mismo, pues varios estudios, artículos e investigaciones se han interesado en este mágico ingrediente y han demostrado que puede eliminar diversos patógenos, ¡hasta E. Coli!
Foto: amado por muchos y odiado por otros, el vinagre es un producto que puede facilitar la vida con todos los usos que tiene / Shutterstock
La Cuaresma es una de las épocas más populares en México y seguir sus costumbres conlleva una serie de acciones que impactan la vida diaria, en especial la alimentación, pues la práctica religiosa tiene lineamientos de los días que no se come carne en el mes, una situación que pone en aprietos a algunos (los meat lovers) o que invita a otros a ser creativos con las recetas. Conoce cuáles son esos días y algunos datos sobre esta tradición.
¿Por qué no se come carne durante los viernes?
La tradición de no comer carne en Cuaresma tiene un origen religioso que está asociado con el sacrificio y la penitencia que pasó Jesús en el desierto antes de su crucifixión. En el contexto católico, la carne se considera un alimento rico y lujoso, por lo que no comerla es un acto simbólico de humildad y sacrificio. Durante la Cuaresma, los devotos también suelen practicar el ayuno (una sola comida fuerte al día, sobre todo el Miércoles de Ceniza y el Viernes Santo, solo para mayores de 18 años y menores de 60) y la abstinencia.
Foto: la Cuaresma y sus prácticas son muy extendidas en el mundo / Shutterstock
Días que no se come carne en Cuaresma
En general, no se come carne los viernes de Cuaresma, pero hay personas que extienden esta abstinencia a los 40 días que dura este periodo (que este 2025 comenzó el 5 de marzo, con el Miércoles de Ceniza, y culminará el domingo 20 de abril, con cierre de la Semana Santa).
Cada viernes de Cuaresma, los fieles evitan consumir carne rojas, como res, o cerdo y pollo, pero pueden optar por otros alimentos, como pescados, mariscos, verduras y legumbres. A pesar de la abstinencia de carne, la gastronomía mexicana durante la Cuaresma es increíblemente rica y variada.
Los días que no se come carne no significan un sacrificio de sabor, sino una oportunidad para disfrutar de una increíble diversidad de platillos. Los tacos de pescado, sopes de nopales, ceviches, tortas de camarón y tamales de frijol o de elote son solo algunos ejemplos de la deliciosa cocina que caracteriza esta temporada.
Además, las caldos de mariscos y las recetas con atún se convierten en opciones preferidas para muchos, mientras que los chiles rellenos de queso o de verduras también son muy populares.
Más que una tradición religiosa, la Cuaresma es una oportunidad para sumergirse en la rica y diversa gastronomía del país. Cada platillo preparado sin carne durante esta época refleja el ingenio y la creatividad de los mexicanos para aprovechar los ingredientes locales y crear sabores únicos.
RECETA DE TAMALES VEGANOS DE ACELGA (40 tamales)
Foto: tamal de acelga, una deliciosa opción para la Cuaresma / Shutterstock
Ingredientes
6 tazas de harina para tamales
3 tazas de manteca vegetal
12 tazas de agua tibia
3 cucharadas de sal
3 cucharadas de comino
3 cucharadas de polvo para hornear
40 hojas grandes de acelga (1 por tamal)
40 hojas para tamal
½ kg de zanahoria en cuadritos cocida
½ kg de papa en cuadritos cocido
500 g de tomates verdes sin cáscara lavados y enjuagados
1 diente de ajo sin pelar
1 rebanada gruesa (30 g) de cebolla blanca
1 chile jalapeño o serrano o más al gusto
1/2 taza de cilantro fresco picado
1/2 cucharadita de sal o más al gusto
Preparación:
La masa:
En un recipiente, blanquear la manteca (amasar hasta que tenga una consistencia lechosa).
Mezclar el harina para tamales, la sal y el comino.
Agregar la mitad del agua tibia sobre los ingredientes secos, mezclar y verter la manteca vegetal. Amasar e ir agregando el resto del agua poco a poco hasta obtener una masa con buena consistencia.
Para la salsa del relleno
Asar los tomatillos, los chiles verdes, la cebolla y el ajo en un sartén caliente hasta que adquieran un tono dorado y un aroma ahumado. Colocar todos estos ingredientes asados en una licuadora o procesador de alimentos junto con una pizca de sal y pimienta. Mezclar hasta obtener una consistencia suave y homogénea.
Verter la mezcla sobre una cacerola y sazonar a fuego medio bajo hasta que espese. Reservar
El armado de tamales
Remojar las hojas para tamal durante 10 minutos en agua caliente hasta qué ablanden, escurrir y reservar.
Colocar una hoja de acelga y 2 cucharadas soperas de masa sobre ella y expandir homogéneamente.
En la parte superior de la masa, rellenar con la mezcla de papa y zanahoria, salsear y envolver.
En la vaporera u olla para tamales, llenar con agua hasta la marca, poner a fuego bajo y tapar.
Una vez que esté caliente la vaporera, acomodar los tamales, tapar y cocinar durante 1 hora.